La nueva versión del sistema operativo de Microsoft promete ser de las mejores con su nuevo diseño y todas las novedades que integra, pero ha nacido rodeado de críticas. A los usuarios no les ha convencido la lista de requisitos que ha impuesto la empresa para instalarla.
Para instalar y ejecutar en un ordenador la nueva versión de Windows 11, Microsoft ha establecido una importante lista de requisitos que obligatoriamente debe cumplir el dispositivo. Ordenadores con procesadores muy antiguos o sin el chip TPM se quedan a las puertas de esta nueva versión.
La expectación y ganas de probar la nueva versión de Windows se disolvió rápidamente cuando se supo todas las condiciones que se pedían para poder instalarla. Con ellas Microsoft ha dejado fuera a un gran número de usuarios cuyos equipos no están preparados para dar el salto de Windows 10 al 11.
Esta nueva versión está aún en fase de prueba y se lanzará al público general en otoño, pero ya hay muchos fans que querían ponerla a prueba y no han podido.
De forma resumida, el ordenador debe integrar al menos un disco duro de 64 GB de capacidad, procesador de 2 o más núcleos, TPM 2.0, 4 GB de memoria RAM y Secure Boot.
Mientras un usuarios conseguir instalarlo en su móvil de 2015, otros ordenadores más modernos no pasaban la prueba de Microsoft PC Health Check Tool, la herramienta que ha habilitado la compañía para que los consumidores puedan confirmar que su ordenador es compatible o no con Windows 11.
Basta con aceptar los términos e instalar para que en pocos segundos esté preparado el programa en el equipo. Después hay que clicar en Abrir Comprobación de estado de PC Windows para iniciar el programa que acaba de instalarse. En la ventana que se abre, destaca el botón para comprobar si tu equipo es compatible con la actualización. Al momento te aparecerá una de las dos opciones: si el equipo puede o no ejecutar Windows 11.
Así las redes se han llenado de personas presumiendo de tener ya instalado Windows 11 y de otras quejándose de no ser compatibles con la versión.
Microsoft sí ha avisado que en los próximos meses, mientras Windows 11 termina la fase de prueba, el sistema se examinará para comprobar si puede ejecutarse sin problemas en procesadores más antiguos y en otros equipos con distintas especificaciones. Posiblemente para otoño, esa lista de requisitos se haya suavizado.
Aún así, con este comienzo Microsoft ha generado confusión entre los usuarios y empañado el lanzamiento de Windows 11. Desde la empresa han tratado de hacer frente a esta polémica explicando los motivos de la lista de requisitos, pero eso no ha evitado el descontento de buena parte de la comunidad de Windows.
