Desde compras del supermercado hasta antojos como pizza, los pequeños robots de Starship Technologies se presentan como la alternativa perfecta de delivery en tiempos de coronavirus.

El aislamiento social y el distanciamiento social, son dos términos que han sido muy utilizados en las últimas semanas. Y es que estas medidas de emergencia se han convertido en una de las principales defensas en contra del coronavirus y su propagación alrededor del mundo. Sin embargo, a pesar del objetivo claro y positivo que esto tiene, las dificultades no han dudado en aparecer.

Robots delivery

Por ello, teniendo en mente lo complicado que es migrar de un estilo de vida en constante movimiento a un aislamiento casi total, diversos restaurantes y supermercados en el mundo han generado una salida práctica e innovadora que además, ayuda a que las personas acaten la cuarentena, se trata del delivery con robots.

Desde fines de marzo, el supermercado estadounidense Broad Branch Market tiene seis nuevos empleados, unos pequeños robots que se encargan de entregar las compras de los vecinos de la comunidad de Chevy Chase, a las afueras de Washington DC.

Tracy Stannard, propietaria del negocio, explica que los aparatos, que parecen heladeras portátiles, reparten en aproximadamente una hora las órdenes que sus clientes realizan a través de la aplicación móvil o el correo electrónico del supermercado.

Asimismo, Venezia, una cadena de pizzerías en Arizona, se ha sumado a la innovadora iniciativa y ya cuenta con varios integrantes robóticos como parte de su equipo de trabajo.

«Tenemos todo cubierto durante la pandemia», explicó a Fox 10 el gerente de la pizzería estadounidense, quien asegura que esta movida es posible gracias a su asociación con el fabricante de robots Starship Technologies.

La nueva ola de robots delivery se ha vuelto un fenómeno viral en redes sociales, pues tal y como afirman las empresas que ya cuentan con ellos, a los consumidores «les encantan» y «realmente los quieren».

Cabe mencionar que Starship Technologies, es una startup de entregas autónomas que lleva funcionando desde el 2014. Y que ahora, con la pandemia de coronavirus y las medidas tomadas para frenar su avance, ha despuntado sus ventas y alianzas gracias a sus pequeños robots de delivery que ya se encuentran en Estados Unidos y Europa.